El Atomium, el símbolo llamativo de Bruselas, que fué construido en 1958, se eleva 102 metros sobre la superficie de la capital belga. Las nueve esferas que lo componen relucen de forma cegadora, cuando el sol se refleja en su superficie curva. Pero también por la noche es muy bonito. Su moderna construcción, parece escapada de un cuento de ciencia ficción.
Tiene un ascensor que es el más rápido de toda Europa. Sube y baja, a la velocidad de 5 metros por segundo, en 23 segundos, sube a la esfera superior arriba de todo donde hay una grandiosa panorámica sobre la ciudad y un restaurante circular que tiene capacidad para 140 personas.
Parque Europa en pequeño.
Tiene que impresionar estar allá arriba.
ResponderEliminarBesicos
Que bonito, Mari Carmen,debe ser una sensación unica recorrerlo y ver todo desde tan alto
ResponderEliminarSeria maravilloso un paseo por ese lugar tan mágico...Unas vistas impresionantes.
ResponderEliminarGracias por compartir las Mari Carmen...Un abrazo desde Málaga.